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De la precariedad al trastorno

Tu trabajo, el estado de tu vivienda, tus ingresos, tu género y tu edad son factores que influyen de manera determinante en tu probabilidad de sufrir un trastorno mental. Diversos estudios constatan que cuanto más baja es la renta o más precario es el trabajo o la vivienda, más riesgo existe.


Ante el empobrecimiento general sufrido desde la crisis de 2008, los servicios de Salud Mental han aumentado significativamente el número de personas atendidas tanto entre adultos como entre menores de edad. Los principales diagnósticos en todas las edades son la ansiedad y la depresión.